Assessora’t

Gestión tributaria: El despacho administra tus compromisos tributarios empresariales ante Hacienda. Salvaguarda el respeto de la regulación tributaria actual, evitando descuadres, sanciones y optimizando tu carga impositiva de forma legal. Incluye la preparación y entrega de impuestos (IVA, IRPF, Sociedades, etc.), la estrategia tributaria para individuos y entidades, la gestión de consultas, y la defensa en inspecciones o requerimientos de la AEAT.

Gestión laboral: El despacho te apoya a manejar y satisfacer todas tus obligaciones en materia de empleo y protección social. Para empresas, implica desde la preparación de nóminas y contratos, hasta la gestión de altas y bajas en la Seguridad Social, la implementación de convenios colectivos y el asesoramiento en despidos o reestructuraciones. A trabajadores, puede ofrecerles asesoría sobre sus derechos laborales, finiquitos, prestaciones por desempleo o reclamaciones salariales. El asesor laboral certifica que tanto empresas como empleados operen dentro del marco legal, evitando litigios y optimizando las relaciones laborales con plena seguridad legal.

Gestión contable: El despacho te ayuda a ordenar, anotar y analizar la datos económicos y financieros de tu empresa o proyecto. Su función principal es llevar al día la contabilidad, velando porque los asientos contables muestren con precisión la situación financiera y respeten la normativa contable y mercantil. Comprende la preparación de balances, cuentas de resultados y la presentación de los libros contables en los registros correspondientes.

Asesoramiento legal: brinda asesoría y defensa legal a personas y compañías en diversas áreas del derecho. Su objetivo principal es prevenir problemas legales, dirimir litigios activos y velar por el respeto a la normativa. Incluye desde la redacción de contratos, testamentos o escrituras societarias, hasta el asistencia en conflictos, procesos judiciales, demandas o procesos contencioso-administrativos. Un asesor jurídico ofrece el asesoramiento especializado necesario para tomar decisiones informadas, defender tus intereses y desenvolverte en el sistema jurídico, sirviendo de abogado y guía en cualquier caso que exija interpretación legal.